Se comprometer a trabajar conjuntamente en formación e investigación para atajar la lacra del racismo, la xenofobia y la discriminación en la sociedad madrileña
Madrid, a 31 de enero de 2022
El Colegio Profesional de la Criminología de la Comunidad de Madrid (CPCM) y Movimiento contra la Intolerancia han firmado hoy lunes un Acuerdo de colaboración activa entre ambas entidades, cuyos fines coinciden plenamente en avanzar en la defensa de los Derechos Humanos y, por ende, en la erradicación de la intolerancia en la sociedad madrileña y española.
El acuerdo ha sido materializado esta mañana por la decana del Colegio y propulsora de este importante entendimiento, Carmen Balfagón, y por el histórico presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra. Ambos, junto a la vocal de Relaciones con Universidades del CPCM, Susana Laguna, han compartido información y experiencias, además de muchos proyectos e iniciativas de futuro conjuntas.
Con el Acuerdo, el Colegio de la Criminología madrileña pone a disposición de Movimiento Contra la Intolerancia el conocimiento y experiencia de la que disponen el conjunto de colegiados, colegiadas y profesionales de ambas entidades para la realización de iniciativas formativas conjuntas, intercambio de información, puesta en marcha de estudios y proyectos de investigación en el ámbito de la intolerancia criminal y asesoramiento mutuo en cuestiones relacionadas con las actividades desarrolladas por las dos instituciones.
Las colaboraciones donde se reflejen las actividades concretas a realizar se reflejarán mediante un Acta de la Comisión de Seguimiento. El Acuerdo Marco, de un año de duración que podrá renovarse por periodos similares.
REFERENCIA EN EUROPA EN LA LUCHA CONTRA LA INTOLERANCIA
Movimiento contra la Intolerancia acaba de cumplir 30 años. Nació a finales de 1991 ante el surgimiento de una fuerte ola de racismo y xenofobia en Europa, que también se manifestó en España con el asesinato en 1992 de Lucrecia Pérez, el primer crimen racista reconocido en nuestro país; además de otros ataques y palizas a minorías étnicas y jóvenes.
Dirigida desde el primer momento por Esteban Ibarra, pionero en la movilización solidaria y pacifista frente a las manifestaciones de intolerancia en España, ha recibido el reconocimiento durante todos estos años por parte de numerosas instituciones. Su trabajo esencial ha sido dirigir la Oficina de Solidaridad con las Víctimas de Odio, el Informe Raxen y los programas de educación en valores de Tolerancia y Derechos Humanos que promueve la asociación.
Las actividades de esta ONG van dirigidas a promover una amplia acción a favor de los Derechos Humanos, la solidaridad, la tolerancia, la interculturalidad y la convivencia democrática frente al desarrollo de aptitudes de intolerancia, violencia, terrorismo, racismo, xenofobia, totalitarismo o cualquier forma de discriminación social. Así como a estimular la participación de la ciudadanía, de todos los sectores sociales, especialmente de jóvenes y menores, en la cultura de la solidaridad con los grupos sociales desfavorecidos, mujeres, ancianos, infancia, minorías étnicas, culturales o sexuales, inmigrantes y refugiados, marginados, con el medio ambiente, el desarrollo humano y las generaciones futuras.
Por su parte, el Colegio de la Criminología de la Comunidad de Madrid, cuya primera Junta de Gobierno se constituyó hace hoy cuatro años, tiene entre otros muchos principios y deberes promover una concepción de la comunidad científica criminológica al servicio de la paz y el progreso social que impulse un concepto activo de esta disciplina como instrumento solidario y democrático de acción y realización de los Derechos Humanos en toda su plenitud; así como cualquier otro fin que impulse la Criminología como instrumento útil de análisis y solución de problemas sociales, como los que en esta ocasión nos ocupan.