Tras muchos años de lucha, ya estamos aquí gracias a la tenacidad de un grupo de personas que creyó en el reconocimiento profesional de los criminólogos y en una bella disciplina que queremos poner en valor.

Ahora queda lo más difícil, o lo más fácil si pensamos que ya hemos conseguido el ansiado Colegio. Por eso, el horizonte no puede ser otro que mejorar día a día el reconocimiento de la profesión. Nos comprometemos a trabajar por los derechos de los criminólogos, a luchar contra el intrusismo y motivar a la cada vez mayor y mejor formada cantera de estudiantes de todas nuestras universidades, con la que también queremos contar. Se trata, en definitiva, de dar conocer e introducir a los criminólogos en todos los lugares en los que un criminólogo sea de utilidad.

Aspiramos, y nos empeñaremos hasta lograrlo, a que la Criminología sea referente en la sociedad, que cuenten con nosotros las administraciones, los órganos judiciales, los servicios penitenciarios y las empresas privadas. Cuantos más colegiados seamos, más fácil resultará todo. Por eso nacemos. Es nuestro momento.

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